Como abogada, una de las cosas que me resulta mas difícil es tener una consulta con alguien que ha sido víctima de fraude, ya sea por un notario sin autorización de ejercer ley de inmigración, o por un abogado sin la experiencia adecuada o sin ningún tipo de escrúpulos. Es sumamente triste hablar con alguien que ha gastado miles de dólares pagándole a alguien que no sabia lo que estaba haciendo; o peor aun, alguien que sabiendo que estaba haciendo daño, lo hizo solamente por ganar dinero.
La practica de ley de inmigración es muy compleja; Dentro del área de inmigración hay abogados que se especializan en ley de asilo, ley de defensa contra la deportación, ley de inmigración familiar, y ley de inmigración a través de negocios, entre muchas otras. Es extremadamente difícil que un abogado con poca experiencia practique todas estas áreas y las practique bien.
Mi deseo es que cada persona que necesita ayuda legal encuentre ayuda adecuada y competente. Con ese deseo, les escribo los siguientes tips para evitar ser victima de fraude.
FRAUDE DE LOS “NOTARIOS” EN EEUU
Los notarios en EEUU no son abogados y es poco probable que estén autorizados para practicar ley de inmigración. En muchos países de Latinoamérica, solamente abogados pueden ser notarios. Los notarios en Latinoamérica tienen un titulo universitario de leyes y pasan exámenes rigurosos para los cuales deben estudiar por meses. En nuestros países, un notario es alguien que tiene toda la autoridad y el entrenamiento para ejercer leyes.
En EEUU, ese no es el caso. Esto se debe a que EEUU tiene un sistema de leyes heredado de Gran Bretaña que se basa en la jurisprudencia. La mayoría de los países latinoamericanos tienen un sistema legal heredado de España, basado mas en lo que se conoce como ley civil y este sistema pone mucho énfasis en las testificaciones de los notarios. Estos dos sistemas son muy diferentes. Para propósitos de este articulo, basta decir que, en EEUU, los notarios no tienen la misma autoridad que en Latinoamérica.
En EEUU, los requisitos varían un poco entre los estados, pero, en general una persona solamente debe llenar una solicitud y tomar un pequeño examen para obtener su sello de notario. El Código de Reglamentos Federales (CFR por sus siglas en ingles), dicta que las únicas personas autorizadas para practicar leyes son: abogados con credenciales validas emitidas por el colegio de abogado del estado donde tomaron su examen de abogacía, representantes acreditados por la junta de apelaciones de inmigración (BIA por sus siglas en ingles), estudiantes de leyes supervisados por abogados con credenciales, oficiales gubernamentales acreditados, e individuos respetables.
“Individuos respetables” es un termino usado para personas que han recibido permiso para comparecer frente a las autoridades de inmigración en un caso individual, que no esta recibiendo pago directamente, y que tiene una relación pre-existente con la persona que necesita representación. Si usted le ha pagado a un notario para llevarle un caso, esta persona no es un “individuo respetable” dentro de la definición de la ley. Y es muy poco probable que esa persona solamente le este ayudando solamente a usted (la ley requiere que este llevando un caso individual), y por ultimo, también es muy poco probable que tenga la autorización del gobierno para representarle.
Un abogado de inmigración competente, para poder representarle tuvo que haber:
- Pasado por un mínimo de 7 años de educación universitaria y post universitaria
- Obtenido una calificación favorable en el examen de admisión a la facultad de leyes.
- Estudiado por varios meses para tomar el examen de abogado, un examen que consiste en un mínimo dos días, de ocho horas cada día, para poder obtener su licencia
- Pasado una evaluación de carácter moral y pasado el examen de responsabilidad profesional.
- Es miembro del colegio de abogados en el estado donde tomo su examen y tiene que cumplir con los requisitos anuales de cursos de abogacía, profesionalismo y ética
- Debe responsabilizarse por cualquier queja presentada en su contra frente al colegio de abogados y puede llegar a enfrentar la perdida de su licencia por comportamientos anti-éticos.
En conclusión, confiarle su caso a una persona que no ha asistido a ningún tipo de entrenamiento y que carece la supervisión que todos los abogados tenemos no es sabio y puede dañarle su caso de manera irreparable. Puede que usted todavía se este pensando que, a pesar de todo el trabajo y la supervisión, todavía hay abogados que dañan a sus clientes. Este es otro tema que vamos a estar tratando en nuestro próximo articulo, “Como Evitar Ser Victima de Fraude por un Abogado.”